¿NECESITAS AYUDA CON TU VISITA A ÁVILA?
Somos unos enamorados de nuestra ciudad y de todos los maravillosos rincones que ofrece, de hecho, en post anteriores os hemos animado a que vengáis a visitarnos, pero hoy vamos a ir un paso más allá y os vamos a ayudar con la visita.
¿Sabríais qué ver en Ávila si vinierais de turismo? Seguid leyendo y os lo contamos.
LOS CUATRO POSTES.
Nada más salir de nuestro hotel, a escasos 20 metros, podéis encontrar el monumento de los Cuatro Postes. Una construcción del S XVI, donde, según la leyenda, Teresa de Jesús y su hermano Rodrigo fueron interceptados por su tío cuando huían hacia tierras de infieles para difundir el mensaje de Dios y morir mártires.
Desde aquí se tiene una de las mejores vistas de la ciudad y de su archiconocida muralla.
LA MURALLA.
Con sus imponentes 87 cubos y 2500 almenas, con un perímetro de 2516 metros, 9 puertas y dos portillos, nuestro recinto amurallado está considerado como el mejor cuidado del mundo, conservando su geometría medieval, y alojando en su interior multitud de iglesias, palacios, calles y rincones donde perdernos y transportarnos a otra época.
Si la recorremos por arriba nos sentiremos como los antiguos defensores de la ciudad y podremos conocer las técnicas defensivas de la época, además de obtener una vista privilegiada del resto de la ciudad, especialmente de La Catedral.
Visitarla por la noche es una de las mejores experiencias que podrás sentir en nuestra ciudad, con una iluminación única que os hará apreciar hasta el mínimo detalle y disfrutar de la noche de una manera distinta a la habitual.
LA CATEDRAL.
La catedral de Ávila se concibió como templo y fortaleza, siendo su ábside, una parte más de la muralla por estar unida a ella.
Es considerada la primera catedral de estilo gótico de España, y estamos seguros de que no os dejará indiferentes, ni por su robusto aspecto exterior, ni por su sencillez interior, haciéndose indispensable observar el trascoro de 1531, el coro, el retablo de Pedro Berruguete y los altares de San Segundo y Santa Catalina.
BASÍLICA DE SAN VICENTE.
Enfrente del Arco de San Vicente y al lado de la muralla encontraremos una de las joyas del románico español, la Basílica de San Vicente.
Está construida en granito, su planta es de cruz latina, con tres naves de seis tramos y un brazo de crucero.
Visitar su interior nos aportará la calma y la paz de un lugar donde parece que el tiempo se ha detenido, y donde el silencio reinante en su interior sólo lo romperán la multitud de aves que pasan por la zona, sobretodo en primavera.
Sentarse en su interior y admirar su retablo y sus bajo relieves de maderas nobles nos permitirá impregnarnos de toda su belleza y energía.
De momento lo dejamos aquí. En el siguiente post seguiremos con todo lo que hay que visitar y degustar en Ávila, no obstante si pasas por nuestro hotel también te orientaremos y te prepararemos una visita mística que recordarás siempre.