Se acerca el 14 de Febrero, día de los enamorados, y aunque muchos pensáis que es un invento comercial creado con la idea de vender a las parejas, lo cierto es que se trata de una tradición tan antigua como romántica. Hoy os la explicamos.
Para empezar, es una tradición extendida por gran parte del mundo, en la que las parejas de enamorados se muestran su amor con gestos que pueden ser materiales, o más espirituales. Sin embargo, no es una fecha tan materialista como nos parece ahora, la tradición proviene del Imperio Romano allá por el año 490.
La leyenda del sacerdote Valentín.
En la Roma del siglo III, el emperador Claudio prohibió los matrimonios al observar que muchos soldados no pretendían unirse al ejército debido al apego con sus esposas y familias. Ante esto, el sacerdote decidió desafiar la prohibición del emperador y comenzó a arreglar, en secreto, matrimonios de hombres y mujeres.
Cuando Claudio lo descubrió, Valentín fue ejecutado el 14 de febrero. Debido a la dedicación del sacerdote y al auge del cristianismo, San Valentín fue nombrado santo y, en el 498 d. C., el Papa Gelasio declaró el 14 de febrero como Día de San Valentín.
Éste marcó en el calendario la fiesta de San Valentín quince siglos atrás. Al igual que ocurrió con otras celebraciones paganas, como las saturnales romanas dedicadas al dios Saturno y el culto al Sol Invictus en plena Navidad, el objetivo era prohibir las Lupercales. Esta fiesta pagana, que se organizaba desde tiempos de la antigua Roma, recordaba a Lupercus, protector de pastores y rebaños que rememoraba a la loba que amamantó a Rómulo y Remo.
Las aves se emparejan.
Los más animalistas se decantan por celebrar San Valentín como el momento en que las aves comienzan el proceso de búsqueda de pareja con la que aparearse, para que los polluelos nazcan en primavera y puedan crecer con la seguridad de un clima benevolente.
Y ¿como hemos derivado en las felicitaciones, regalos y bombones?
Fue en pleno S XIX cuando la artista Esther Howland se aprovecho de la moda de regalar felicitaciones en Estados Unidos, y creo unas tarjetas de felicitación conmemorativas para celebrar el amor.
A partir de ahí simplemente hemos ido rizando el rizo y buscando la originalidad y la sorpresa en nuestra pareja.
Bombones, tarjetas,poemas, cenas, noches de hotel… todo vale para demostrar a nuestra pareja lo que sentimos por ella, y aquí es donde os podemos ayudar.
Si decidís celebrar una noche romántica, una cena con vistas a la muralla, o cualquier otro tipo de sorpresa, pondremos toda nuestra experiencia a tu disposición.
Esa experiencia nos dice que lo que mejor funciona es una mezcla entre lo personal, con una declaración en papel por ejemplo, con lo material, con una buena cena que termine en un postre espectacular.
Aunque la experiencia nos dice también que o que debéis hacer es celebrar San Valentín todos y cada uno de los días del año. Al fin y al cabo, no sólo estamos enamorados en febrero ¿no?.