Hoy os vamos a hablar de la figura del sumiller dentro de nuestro restaurante, un puesto tan importante que no entenderíamos nuestro comedor sin su trabajo y su presencia.
Allá por el S. XVII surgieron los primeros sumilleres como los trabajadores de las casas y los palacios de la época, encargados de la bodega y de la elección de los caldos de sus nobles habitantes.
En la actualidad el sumiller cuenta con muchas más funciones dentro del restaurante, encaminadas todas ellas a incrementar la satisfacción de nuestros clientes, brindándoles consejos en cuanto a la elección del vino, consiguiendo la mejor experiencia gastronómica para el cliente.
Evidentemente la prioridad para el sumiller es guiar a los clientes en la búsqueda del maridaje ideal con el fin de potenciar el sabor, tanto del alimento, como del vino. Para ello nuestros sumilleres conocen a la perfección todos los aspectos de nuestra carta de vinos y son capaces de responder ante cualquier duda planteada por los comensales.
Por supuesto que son los encargados de la bodega de nuestro hotel. Nuestros sumilleres son los máximos responsables de la administración de nuestra extensa bodega. Para ello siguen un riguroso proceso en la selección de los caldos que posteriormente vamos a a servir, pero también se encargan del abastecimiento y la conservación del vino y de las bebidas espirituosas.
La recomendación de un buen vino que maride a la perfección con cada plato comienza en la elección de las bebidas que van a conformar nuestra carta. Aquí los sumilleres tienen un difícil trabajo, ya que deben elegir los vinos que mejor mariden con los platos de nuestro menú, pero además aportan ideas nuevas, que contribuyen a mejorar la experiencia culinaria de nuestros clientes, complaciendo así a los paladares más exigentes.
Para ello están en continuo aprendizaje, probando diferentes vinos, diferentes añadas, viajando en busca de los mejores caldos, para después poder ofrecer a nuestros clientes los vinos y las bebidas con el mejor sabor y de la mejor calidad.
Nuestros sumilleres también están preparados para aconsejar y recomendar a nuestros clientes sobre otras bebidas destiladas como cócteles y cervezas. Además tienen amplios conocimientos sobres café, infusiones, cigarros y puros, así como sobre especias y aceites.
Por último los sumilleres expertos se encargan de la formación de nuestro personal en aspectos tales como la asesoría a nuestros clientes o el correcto servicio del vino y del resto de bebidas, consiguiendo así camareros y personal altamente cualificado que contribuirá a dar el mejor de los servicios en nuestros comedores.
En la actualidad es tal la importancia del sumiller en nuestro hotel, que no concebimos el comedor sin su presencia ni sus consejos, y ellos están encantados de ayudaros en la elección del vino que mejor maride con vuestra comida, además de resolveros todas las dudas que os puedan surgir en nuestro restaurante.
Un excelente mentor para nuestro personal. La formación y asesoría del personal es en cuanto al correcto servicio del vino, es otra de las funciones que debe ejercer el sumiller, lo que garantiza un aumento de la productividad en el negocio